ENSOÑACIONES Parte II Continuación
ENSOÑACIONES. Parte II Continuación
Dr Mario H. Romano, Psicólogo
Un modo de acceso a nuestro interior es reconocer en vigilia algunas vivencias de ensoñaciones, sueños diurnos
o soñar despiertos. Aún ligeros y
pasajeros nos facilita acercarnos a nuestro interior. Surgen independientes de
lo que estamos haciendo. Elisa camina
pero no puede sustraerse de la preocupación
“flotante” que le ha generado la discusión con su mamá. Qué bronca siente, pero a la vez ansiedad e
intranquilidad por haberse afectado otra vez el vínculo. No deseaba que se
repitiera, pero sucedió. Es impulsiva, lo sabe. En un momento percibe que
alguien habla pero continúa caminando. Abstraída en lo suyo, sumergida en
aquella escena, elucubrando las consecuencias inmediatas del hecho, no puede advertir que el saludo
era de su mejor amiga. Vivir dos
tiempos a la vez. Uno en la realidad
sensorial, tangible, otro
en el escenario interno. “Darse manija” o “engancharse suspendida/o” en
una escena interna reflejan expresiones en idéntico sentido, cuyo contenido
puede ser preocupante o placentero. Javier
se emociona al recibir el saludo de Agustina y no puede borrar su imagen hasta
que llega en auto a su casa. Esa noche no puede dormir fantaseando con ella. Pensamientos,
afectos, pulsiones, sensaciones gravitan de modo natural en nuestro mundo
interno. Son naturales a nuestra condición humana. Miguel de Unamuno
ejemplifica en “Niebla” un modo particular de vivir la realidad a través del
personaje Augusto Pérez, quien se dice a
sí mismo “Pero…¿dónde me llevas loca
fantasía?” consciente de su ficción. Contenidos
imaginarios que acompañan los hechos o se anticipan a ellos, a veces
instantáneos, fugases. Los anticipatorios son más evidentes en su carácter
“inventivo” y desnudan con mayor transparencia lo que agregamos. Preocupaciones
flotantes con escaso fundamento pueden
también manifestarse en el modo
anticipatorio en que “se construyen”
miedos y alimentan ansiedades. Primero darnos cuenta nos permite diferenciar esa delgada línea roja entre hechos y microfantasías que ponemos en juego en muchas
situaciones que vivimos. Segundo, evitar el autoengaño cuando nos sentimos mal por algo que suponemos sin analizar bien qué es y cómo es. Tercero, canalizar la energía imaginaria para crear,
buscar alternativas, soluciones pero “con
los pies en la tierra”. Cuarto, buscar el sentido de lo que imaginamos para descubrirnos mejor.
Muchas gracias! Como siempre, tus dichos esclarecen y ayudan
ResponderBorrarMuchas gracias! Como siempre, tus dichos esclarecen y ayudan
ResponderBorrarP"flotantes con escaso fundamento pueden también manifestarse en el modo anticipatorio en que “se construyen” miedos y alimentan ansiedades."
ResponderBorrarGracias Mario.