"¡QUÉ ONDA?"
“¿QUÉ ONDA?”
Reflejos de nuestro mundo interno…
En
los humanos es fuente de transformaciones creativas. O destructivas.
Karina
reforma su vivienda luego de un divorcio conflictivo. Necesita renovar el
espacio donde vive. Su deseo es iniciar un ciclo diferente.
Julian en cambio, resentido en su
narcisismo “enfermizo” niega los errores que perjudicó a terceros.
La
energía se transmite.
Si
es positiva comunica entusiasmo, aliento, fuerza, calma,
serenidad, sosiego. “Buena onda” en la jerga habitual. Ayuda a vivir.
Ana acompaña el proceso final
de personas con estado crítico en su salud. Marcos escucha con atención a su
amigo que atraviesa un conflicto familiar. Se contacta con él para alentarlo.
“¡Ánimo, fuerza!”
traduce la intención de apoyar un desaliento. O sostener el último oxígeno para
llegar a la meta.
Si
es negativa desanima, genera incertidumbre, intranquilidad, culpa,
confusión. Descalifica, obstruye, paraliza. A veces agresiones encubiertas que
lastiman, perjudican, dañan.
Alejandra agrede con ironías a
su hermana. Siempre le tuvo celos. Creció con resentimientos que no pudo
superar. Ignacio indiferente a los reclamos de los hijos desestima sus
necesidades y se enoja. Refleja menosprecio,
“mala onda”, desinterés, distancia.
Hay diferentes situaciones y momentos
que todos, sin excepción, atravesamos. Aquí no nos referimos a circunstancias
excepcionales como sentir enojo por perjuicio personal o ajeno, depresión ante
una pérdida, o agobio por un esfuerzo no compensado. Sí a la actitud promedio que sostenemos con nosotros y los demás.
En
algún momento asoma el contenido encapsulado. Postura
corporal, gestos, semblante, mirada,
tono de voz, modo de hablar, “elección” de palabras, etc, delatan contenidos anímicos
de nuestro mundo interno difíciles de ocultar.
¿Somos conscientes de la
tendencia de energía “positiva” o “negativa” con que alimentamos nuestra vida?
¿Qué transmitimos, y qué nos transmiten? ¿Cómo no recordar una máxima universal que trascendió los siglos? “Por sus frutos los conoceréis”, mensaje evangélico de San Mateo, 7:16-20.
La realidad desnuda el contenido del
envase.
“Ondas”
buenas o nocivas, que reflejamos más allá de lo que suponemos. "Espejan” lo
que somos.
Gente positiva es aquella que cuando cae limpia las heridas y vuelve a empezar.....Gracias,muy útil.
ResponderBorrarDe acuerdo. Gracias
ResponderBorrarGCIAS DOC MUY POSITIVAS SUS PALABRAS
BorrarMuy bueno Mario
ResponderBorrarExcelente Mario !!! Gracias....
ResponderBorrarEl trabajo sobre mi-mejorando el trato hacia mi misma- incide en los otros.Mario,gracias
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