IMPRONTA PERSONAL

 IMPRONTA PERSONAL

Mario H Romano, Doctor en Psicología

“… viajé y disfruté, no sé si más que otro cualquiera, si bien, todo esto fue, a mi manera…”  de  “My Way” o “A Mi Manera”, Claude Francois  y  Paul Anka

 

Cada persona es única  (irrepetible) y solo idéntica a sí misma. Singular (especial), histórica  (época, contexto, circunstancias personales/sociales), biográfica (progenitores, nacimiento, lugar, desarrollo, hechos propios, etc) e intransferible en sus vivencias (lo que siente, cómo, en qué grado e intensidad) No somos robots. Y cada sujeto es diferente al conjunto, a la masa.

Actitudes, gestos, posturas, sensaciones, modos de sentir, pensar, hacer, son exclusivas de cada persona. Sus goces, conflictos, duelos, inquietudes, también. Más aún, matizados por su propio inconsciente.

Cada conducta refleja originalidad, estilo, sello propio. Mirada, voz, modo de caminar. Como las impresiones digitales.

¡Qué difícil es “ponerse en los zapatos de otro”! “No logro serenarme… tengo broncas acumuladas… “  señala Josefina hablando de su pareja. Frente al cuestionamiento de un tercero, pregunta “¿qué harías en mi lugar?” Las posibles respuestas no dejan de ser ajenas, extranjeras. Los consejos relativos.  Cada vínculo necesita encontrar sus propias conclusiones. “Los de afuera son de palo”, traduce el dicho popular.

De ahí que lo más importante es escuchar la particular resonancia de lo que allí se expresa.

En toda consulta se busca que el consultante se escuche. Que no es poco.  A partir de ahí encuentre su voz. Y pueda descubrir el sentido de lo que vive. Las palabras levarán “su sello”. Serán únicas, singulares, especiales.

Como Vos.